En todas las provincias del país, las noticias por delitos de violencia sexual e intrafamiliar se concentran en las capitales de provincia, así por ejemplo del total de denuncias presentadas en el 2012 de Imbabura, el 56% de los casos se concentra en la ciudad de Ibarra.
De 300 denuncias presentadas en la provincia de Imbabura, 167 corresponden a Ibarra, 50 en Otavalo, en Antonio Ante 39, Cotacachi 27, Urcuquí 13 y en el cantón Pimampiro 4 casos.
Al comparar estas cifras con los testimonios de las personas en cada provincia y las encuestas sobre incidencia de la violencia en las relaciones de pareja, se evidencia que en los cantones dispersos, sobre todo en las áreas rurales y de difícil acceso, las víctimas de violencia enfrentan graves dificultades para presentar sus denuncias ante los organismos competentes, debido a la ausencia de fiscalías o salas de primera acogida que recepten las denuncias, la necesidad de contar con recursos y oportunidad para trasladarse a la capital provincial y de tener redes sociales de apoyo para hacerlo.
Las mujeres indígenas, afro descendientes y migrantes siguen siendo las personas más vulnerables de la violencia de género, no hay estadísticas, los testimonios recabados en talleres y entrevistas con informantes clave, determinan que en un contexto xenófobo, racista, hemofóbico, adultocéntrico y violento, la doble o triple discriminación que sufren las mujeres por su pertenencia étnica o por su condición migratoria, así como por su edad, orientación sexual, les expone a una posición extremadamente vulnerable. (Cpccs)