En la última Encuesta Nacional sobre Relaciones Familiares y Violencia de Género contra las Mujeres, se determinó que 19 de cada 100 mujeres, en algún momento de su vida, fueron víctimas de algún tipo de violencia en el ámbito educativo. Esta cifra adquiere un nuevo significado cuando en los últimos días observamos, a través de las redes sociales, a estudiantes de una institución educativa de Otavalo violentando a una de sus compañeras tanto física como psicológicamente, señaló Paolina Vercoutére, Viceprefecta de Imbabura.
“La violencia es violencia, sin importar su origen, pero es crucial abordar la raíz del problema. Como Warmi Imbabura, estamos listas para proporcionar ayuda psicosocial, la cual debería priorizarse en este caso para la víctima y su familia. Ofrecemos nuestro sentido de sororidad y estamos dispuestas a apoyar en el proceso a quienes cometieron este acto”, aseveró.
En este sentido, dijo que participó en la Reunión del Comité de Seguridad y Violencia en la Gobernación de Imbabura, un espacio en el que coincidimos varias instituciones y donde uno de los temas determinantes es la responsabilidad que cada institución pública tiene respecto a los protocolos que debe cumplir.
Es necesario que las rutas, los protocolos y las normativas no se queden únicamente en papel o en promesas de cambio, sino que se ejecuten en el territorio; todas las políticas elaboradas deben ser cumplidas para que podamos convivir en espacios dignos donde las mujeres puedan desarrollarse de manera tranquila, libre y sin que sus capacidades sean coartadas o intimidadas por ninguna persona,agregó Vercoutére.
