2006
Por Jaime Salazar P.
Guissela Echeverría, imbabureña, educomunicadora, periodista de Radio y tv, terapeuta familiar sistémica. Especialista en Comunicación Humana, Sexualidad y Manejo Emocional. Escritora. La visitamos en radio Sonorama en donde es la Directora, conduce su programa habitual denominado “Adán sin Eva”.
P. No es usual que una mujer esté al frente de radio Sonorama en Quito?
No sé si sea usual o no, que las mujeres hemos tenido un gran desarrollo en el último tiempo y hemos abarcado áreas de profesionales, que antes estaban ocupados por los hombres, pero es perfectamente normal como resultado de un trabajo, esfuerzo que las mujeres podamos llegar a cualquier sitio que queramos o que la vida nos ponga.
¿Antes la mujer estuvo excluida de estas actividades políticas, económicas y ahora en comunicación?
No creo que sea exclusión, sino menos oportunidad por el sistema patriarcal en el que todavía la sociedad machista nos tiene, hace que las mujeres hayan permanecido al interior de sus hogares dedicadas a las tareas domésticas, a la educación de sus hijos, pero el devenir de la historia ha propiciado momentos en los cuales para las mujeres se volvió indispensable estudiar, prepararse comprender, que parte de la esclavitud en la que hombres y mujeres han vivido a nivel de las relaciones de pareja estaba dado por la dependencia económica.
¿Cómo es la relación de una directora mujer con el personal masculino, es el mismo respeto, que si fuera un hombre el Director?
No existe ninguna diferencia, no tiene que ver con una cuestión de género, no importa si es que uno es hombre o si es mujer, depende de la capacidad de manejo de un grupo humano, depende de la capacidad de manejo de un grupo humano, depende de qué tanto liderazgo exista en una persona.
¿Cómo puede vivir Adán sin Eva?
Esa es una respuesta que tienen que darla los propios adanes. El nombre de Adán sin Eva tiene mucha connotación, es algo que llama la atención, este nombre lo creé como contrapartida de un espacio que se llamaba jueves solo de mujeres cuando estuve en la radio de la Universidad San Francisco de Quito, era un programa donde yo hacía entrevistas a mujeres destacadas del medio en distintos ámbitos.
Hice el espacio Adán sin Eva para hablar con un hombre solo acerca de los temas de equidad de género; luego recuperé el nombre para abarcar un programa como el que hago hoy con entrevistas a profesionales, la intención es propiciar reflexión sobre las relaciones de pareja y de igualdad.
En la vida práctica seguimos viviendo un 68% lamentable de violencia en contra de la mujer, debería llamar la atención de todos y esto pasa por la forma como hemos sido educados, pasa por la relación que nos han enseñado a mantener con los demás, la forma como las niñas son educadas para el servicio a los hombres, para que sean mujeres sumisas ocupadas de las tareas domésticas, pasa por el hecho de que las madres y las mujeres seamos las primeras reproductoras del machismo en el cual hacemos que un hombre se sienta como un rey y una mujer su sirvienta.
Si se establecen relaciones de pareja en esas condiciones o más probable es que esas relaciones fracasen, lo más probable es que siempre la relación se sostenga en base al sacrificio de uno de los dos, considero que las relaciones de pareja, deben ser relaciones de amor, el amor tiene que empezar por uno mismo, si yo me amo, voy a tener la capacidad para pedir respeto y una relación justa.
Los hombres y las mujeres vivimos como hojitas al viento, dejamos que el viento nos lleve por un lado y por el otro, pero no tomamos la vida en nuestras manos, no decidimos que queremos hacer.
¿Su programa es para evidenciar realidades de su vida?
No, de ninguna manera, porque yo no puedo estar poniendo como ejemplo en cinco programas a la semana de dos horas de duración, que es lo que yo he hecho con mi vida, es más creo que las cosas de peor gusto que pueden ocurrir en los medios de comunicación, es que los presentadores y los locutores exhiban su vida privada a las audiencias, es de muy mal gusto, además es incorrecto en comunicación.
Sin embargo, todo lo que he vivido, al igual que la vida de las personas se expresa de alguna manera en las inquietudes, en los intereses, para mí ha sido importante e l conocimiento de los seres humanos; yo hice una maestría en edu cumunicación en la Universidad Politécnica Salesiana, a partir de ahí he desarrollado líneas de pensamiento muy claras, líneas filosóficas que son las que conducen mi trabajo.
Mi interés es propiciar en las audiencias, reflexión en los temas que yo toco, porque mi pensamiento es netamente humanista, si no logro comprender que el camino al que se dirige la humanidad tendría que ser necesariamente en la búsqueda de la paz y de la instauración del amor como norma, no estaría trabajando sobre esto.
La gente tiene miedo de sonar ridículo al decir esto es hablar del amor, yo si hablo del amor, de un amor que para mí no ha sido un descubrimiento, es un amor que existe en todos los seres humanos, lamentablemente nos negamos a escucharlo.
¿Existe la felicidad existe Dios, existe el alma?
Yo soy absolutamente creyente, este cuerpo físico no es otra cosa que un vehículo para ese espíritu que habita en nosotros.
¿No somos como los animales?
Todos somos seres vivos, somos seres de la naturaleza y los seres humanos correspondemos a un reino animal, pero estamos tocados de otras características, el mismo hecho que tengamos la capacidad del lenguaje nos invita a que pensemos, nos invita a que elaboremos pensamientos, a que leamos, a que nos instruyamos, a que no hablemos estupideces, a que cuidemos de nuestro lenguaje, a que no improvisemos, y no creamos que con inventarnos las cosas, con intuir, ya sabemos todo.
¿Eso hace la radio?
No es una crítica a la radio, tampoco me gusta generalizar, pero considero que las audiencias y nosotros mismos tenemos la inquietud de hacer las cosas mejor, que lo hagan.
¿A Dios porque se lo representa como hombre y no como una mujer?
Dios no tiene género. Yo no soy una persona que apegada a la religiosidad, pero tengo una riqueza y me he preocupado mucho de cultivar mi mundo interior y eso corresponde al orden de lo espiritual, la vida se desarrolla en muchos planos.