Antonio José Cortés Pantoja ha fallecido en Sevilla tras sufrir un ataque al corazón, tras una operación de cadera que se le complicó

Había interpretado las pasiones humanas con la música como pocos de su generación y un infarto de miocardio ha apagado la existencia de quien hasta sus últimos minutos llevó el ritmo y la armonía al alma de la gente.

Unos pequeños infartos de miocardio fueron los previos para acabar con la vida de Antonio Cortés Pantoja, el popular Chiquetete que hizo del flamenco y la copla un lenguaje universal.

Chiquetete había sido ingresado en el Hospital Fátima de la capital sevillana el pasado lunes para ser intervenido de un problema de cadera. Pero unos microinfartos le llevaron a que le implantaran un stent coronario que ha sido insuficiente para prolongar un corazón grande que en vida se llenaba con poco.

Su mirada triste e introvertida, de una timidez extrema, igual que la generosidad de su corazón, vino en desgracia desde que fuera satanizado por el circo televisivo después que su ex mujer, Raquel Bollo, lo acusara de propinarle varias palizas, que le habrían provocado presuntamente un aborto, y de que la Justicia le condenara por impago de la manutención de los hijos que tuvieron juntos.

Chiquetete fue la voz gitana que dio un giro a la historia de los festivales flamencos, lo que no quita para que fuera número 1 en la lista de éxitos o que fuera conocido como el primo de Isabel Pantoja, cuando La magia de la voz, como fuera llamado en los años 80, ya era considerado antes de que saliera a escena la canzonetista, a la que incluso llevó en su cuadro.

Andaluz, gitano de la hermandad del mismo nombre, verderón del Real Betis Balompié y rociero, Antonio procedía de una familia gitana de amplias raíces flamencas.

Dos de sus grandes temas de los años ochenta son “Aprende a soñar” y “Esta cobardía”

Categorías: Farándula