Por Fausto Giraldo
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Correcto que se haya elaborado un cronograma para concluir los adoquinados en calles de los barrios que hayan suscrito convenios con el municipio y hayan realizado depósitos por parte de los moradores.
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Correcto que se tomen en cuenta a los barrios en donde se hayan hecho depósitos económicos de hasta el 80% de los valores y el faltante se cobre en ventanillas a través del impuesto predial a los moradores que no hayan abonado dichos valores.
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Correcto que se culminen adoquinados en calles que han sido aperturasdas para tal efecto y que están paralizadas.
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Correcto que no se realicen más trabajos hasta culminar con el cronograma, hay que ordenar y planificar bien el proceso de adoquinados.
Hay que hacer un plan integral de adoquinados, por lo menos para un periodo de 10 años mínimo, considerando variables e indicadores respecto a necesidades en barrios tanto de vialidad, seguridad, vulnerabilidad, crecimiento demográfico, capacidad de pago, justicia y equidad en sectores económicamente bajos y otros aspectos, capaz que la intervención de la municipalidad no sea contaminada por la influencia de padrinos, amigos, concejales y allegados, sino adoquinados en función de la necesidad de desarrollo.
Incorrecto que se continúe “adoquinando” el mensaje de inadecuado manejo de los recursos por parte de la empresa municipal, sólo apliquen la norma jurídica que permita sancionar a los responsables previo las investigaciones pertinentes y de ser el caso de existir peculado, enjuicien, pero “dejen la queja de hace rato”, asuman la administración municipal y dejen de seguir en la politiquería.
Incorrecto que la socialización sobre los adoquinados no se haya explicado adecuadamente los compromisos de pago y responsabilidades, sobre todo de la población, cuando aún aportando cuotas para adquisición de adoquines tengan que cancelar a futuro la taza por mejoras. Eso no está claro y traerá consecuencias politico sociales para la actual administración.
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