Alcohólicos Anónimos, es una comunidad internacional de ayuda contra la enfermedad del alcoholismo, iniciada en 1935 por William Griffith Wilson y Bob Smith en Akron, Ohio (EE.UU).12 Consiste en agrupaciones de plena autonomía de hombres y mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver el problema común y ayudar a otros a recuperarse del alcoholismo. Para ser miembro, el único requisito que declara el nuevo adherente es su deseo de dejar la bebida. Es una asociación sin ánimo de lucro y sin afiliaciones a religiones o partidos políticos, y a ningún otro organismo
Expectativa conversó con Mario, un Alcohólico de Ibarra, quien dejó la bebida hace 27 años.
¿Mario cuánto tiempo ya en Doble AA?
Gracias al programa de la comunidad de Alcohólicos Anónimos 27 años sin beber.
¿Cómo es que usted decide decir hasta aquí no más y dejo de beber?
En el año 1995, después de haber pasado una serie de problemas en mi hogar, en mi trabajo, después de haber buscado ayuda, me indicaron que Alcohólicos Anónimos era la única solución, ahí pude llegar y pude parar.
¿Se acuerda como tocó fondo?
Me desaparecí cuatro días de la casa y del trabajo en un carnaval, mi señora me buscaba y yo estuve encerrado bebiendo con amigos, sin comer.
¿Qué licor tomaba usted, qué marca?
Empezábamos con cerveza, luego el trago, pasamos a beber los tragos que sobraban, con moscos. Me enfermé seis días, el efecto después de la borrachera eran vómitos, diarrea, la conciencia de no haber estado en la casa 4 días, ese mismo día me mordió un perro, no me había dado cuenta, llegué a la casa y me dije, esto se termina.
¿De ahí que pasó?
Este programa es espiritual, Dios me ha querido y en un viaje que hacía desde Riobamba a Quito, un señor me cede el asiento, pero me iba en un chuchaqui terrible, él me dice usted está enfermo, me dice que yo también era así, y me comienza a conversar su vida con el alcohol, ha sido de un grupo de Cuenca y me pasa el mensaje.
Me invita a asistir a grupos de doble AA, cuando me di cuenta ya me pasó el efecto del chuchaqui, llegamos a Quito y me dijo que en San Blas había un grupo y pude ir en la noche a escuchar.
¿Salió usted esa noche adelante y decir soy alcohólico?
Una vez que escuché a unas seis personas, me animé a salir al frente a compartir mi experiencia de vida, ahí los compañeros me abrazaron, me felicitaron y me gustó ese afecto, porque yo no recibía afecto de nadie como un año me tenían separado.
Me retiré a las 4 horas de estar en el grupo de Alcohólicos e inmediatamente fui a verle a mi hijo y le dije, hoy he decidido dejar de beber, desde ahí son 27 años sin probar una gota de alcohol.
Pero debe haber la tentación, siempre hay los amigos inquietosos
Obviamente, pero este programa la enseña a uno como decir no a la primera copa, los amigos entre comillas como hay que dejarles, yo sabía dónde estaban ellos, yo me iba por otro lado.
No hay que tampoco aislarse de la sociedad
A mí me gusta la música, canto, claro que en ese tiempo, la música me llevó al alcoholismo, pero hoy hago la música sanamente, bailo disfruto con el programa.
¿Hay personas que toman dos o tres tragos y paran, usted no podría hacerlo?
Yo no, por eso nuestro programa nos habla de Alcohólico social y alcohólico problema, el primero es que toma dos tragos o tres y dice gracias y se va, el alcohólico problema se queda hasta el final de la fiesta, hasta el otro día.
En ese proceso pueden ocurrir muchos problemas, asaltos, peleas y puede morirse.
¿Por qué usted tomaba, le gustaba el licor, es un vicio?
Nuestra enfermedad es hereditaria, es congénita, mi padre fue alcohólico, en mi caso, yo era una persona muy amigable, me gusta todo deporte, todo juego de azar, la música, no había escapatoria, yo era semanero de viernes, sábado y domingo.
¿El entorno social favorece al consumo de alcohol?
Ese entorno social me tenía terrible, enamorado, me gustaban las mujeres, la música, los amigos decían tenemos este programa el fin de semana, no había escapatoria; después cuando estuve bien enfermo no había nada de esas fiestas, yo me inventaba las fiestas, era mentiroso.
Cuando yo entré al programa de Doble AA y dejé de beber la vida se ve de otra manera, se empieza a recuperar los valores, los principios porque todo desaparece, uno se vuelve un sinvergüenza, un irresponsable, un o vuelve a recuperar la confianza en la esposa, el cariño de los hijos, la responsabilidad en el trabajo.
¿Qué son los 12 pasos?
Esos 12 pasos son espirituales, para tu recuperación personal, tienes que creer en un poder superior a ti, como soy cristiano creo en Dios.
¿Ustedes no pueden decir, bueno por hoy voy a tomar dos copitas y mañana dejo de beber?
Nosotros ya no podemos, los que aceptamos que el alcohol nos ganó, que nos terminó, es cero. El alcohol no es el problema, podemos tener una licorería al frente, el problema es nuestra enfermedad, no podemos ni una copita. Tengo en mi casa licores de hace años, pero nada.
¿Usted era el paganini en las borracheras?
Claro, el gasto, es lo que mi mujer me decía, mira, podríamos tener un carro, una casa, con todo ese dinero que malgastamos, ese dinero no se puede recuperar, tampoco la dignidad.

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