En el libro del MIES, denominado: “Igualdad, diversidad y discriminación en los medios de comunicación”, en donde se hace un estudio sobre los programas de entretenimiento y farándula en Ecuador en el año 2014, se concluye que hay discriminación y sexismo en algunos programas.
De acuerdo a estas investigaciones, los programas de entretenimiento reproducen roles estereotipados de género, donde el cuerpo de la mujer cumple la función de seducción, mientras que en los hombres la seducción, no se da por el cuerpo, sino por su gracia.
En estos programas refuerzan los estereotipos de género y el discurso patriarcal, la imagen de las mujeres es utilizada como objeto decorativo y sexual, además se trata de un atentado a los derechos humanos, pues no se les presenta como seres diversos, sino como un grupo homogéneo.
El humor es usado como un mecanismo para promover la discriminación, utilizando la burla sobre los sujetos que no calan en los roles de género naturalizados, pero lo curioso es que a pesar de ser polémicos son programas que ocupan altos niveles de raiting.
Conclusiones:
El sexismo en los medios de comunicación se expresa de las siguientes maneras:
El lenguaje excluyente y discriminatorio es más evidente en la crónica roja. La mayoría de las veces que se aborda temas de violencia de género existe una adjetivación o uso peyorativo de términos para describir a las mujeres.
El hecho suele ser “justificado” al darle un sentido pasional
Mientras la mayoría de quienes cubren temas serios son hombres, las mujeres se encargan de farándula, sociedad, cultura y familia.
Aunque existe cierta paridad entre presentadores y presentadoras de noticias, el rol de la mujer sigue siendo subordinado. Los espacios de opinión son dominados por la voz masculina.
En general en noticias televisivas, programas de farándula y publicidad, las mujeres son presentadas como objeto decorativo sexual.
Las publicidades y los programas de entretenimiento muestran roles esencializados de género en donde las mujeres ocupan el espacio privado y el hombre el público. La función de la imagen de la mujer es como objeto de decoración, u objeto sexual y al servicio del hombre
De acuerdo a la investigación realizada, hay una visión de los medios de comunicación como creadores de comportamientos sociales y patrones culturales, mientras a la población se le ubica en un rol privilegiado en lo que se refiere en su capacidad de influir en la población