Una vez lo dije y lo vuelvo a repetir, hay muchas clases de artistas y luego están los artistas con clase, y uno de ellos es Alfonso Barek, este guayaquileño con canto y encanto, que hace una combinación perfecta entre el oficio y la profesión.
El oficio de ser un cantautor y la profesión de ser un experto en la gestión educativa. Después de la tormenta viral, los artistas ecuatorianos tienen que replantearse; ¿Cómo salir adelante y cómo hacer que sus temas ocupen los primeros lugares? Y, sin duda el antídoto es; luchar, trabajar y ser creíble más que nunca
Hoy un artista no alcanza sus metas como ayer, porque ese ayer, quedó en el pasado, luego de la tragedia viral que nos enclaustró y abandonó. Alfonso Barek nos entrega este mensaje de cómo levantarse de las cenizas como un ave fénix, es que hoy un artista tiene que ser un portavoz no solamente con sus notas musicales, sino con un mensaje diario y un ejemplo para nuestra sociedad.
Me da vueltas, se escucha, se baila y encanta a una juventud que no tiene edad, pero si tiene deseo de olvidar tragedias, corrupciones y algo más. Este tema logró un millón de visitas en You Tube en apenas dos semanas (Enrique Avilez M).
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