Por Jaime Salazar P.
Junio de 1987, es una fecha que no puedo olvidar por dos motivos: por estos días nacía mi hija María José y salía al aire el primer número de “ El Norte”, en ese tiempo nació como “ Diario del Norte”, periódico que surgía justamente en el aniversario de la provincia de Imbabura, aparecimiento que causaba expectativa en la sociedad de ese entonces, cuyos principales protagonistas sentían que venían nuevos tiempos, de mayor información, más variedad y profesionalismo en el tratamiento informativo.
Precisamente, el visionario hombre público y periodista Luis Mejía Montesdeoca buscaba a través de este medio, incorporar en su planta de periodistas a profesionales que salían de las facultades de comunicación y otros que estudiaban periodismo y a punto de concluir su carrera, con el objeto de presentar un buen producto a los lectores de las provincias de Imbabura y Carchi.
Para mí, el formar parte de este importante diario fue fundamental en mi formación, crecimiento y en experiencias, porque cada día uno se va enriqueciendo y aprendiendo sobre esta noble profesión.
Los periodistas
Los periodistas y los estudiantes de comunicación que en ese entonces laboraban en Diario El Norte eran : Luis Mejía, Director y periodista, Luis Cifuentes Subdirector desde Quito en ese entonces estudiante de comunicación, Jaime Salazar, Editor Político, egresado de Comunicación, Licenciado Pablo Jurado, Editor Social, Daniel Jaramillo, Editor Deportivo, Simón Borja, Patricio Pérez, egresado de comunicación, Licenciado Ramiro Bucheli, Subdirector Ibarra, periodista del Carchi, Richard Cabezas, caricaturista Win
Empecé como editor y llegué a ser Subdirector de Diario El Norte, director de radio Los Lagos, eventualmente apariciones en el noticiero de TVN, cuando formaba parte del Grupo Corporativo del Norte.
En verdad éramos pocos periodistas que hacíamos varias actividades a la vez; en la provincia de Imbabura no había muchos colegas, todo estaba en crecimiento, eran sin duda otros tiempos, sin la tecnología actual, no existían las redes sociales, pero se laboraba con mística y apasionamiento en un trabajo articulado para que salga un buen producto.
Sin duda mi paso por el Diario El Norte, es inolvidable en mi vida profesional y personal, porque encontré grandes amigos que hasta ahora nos vemos y directivos como Luis Mejía y su hijo Borys Mejía que me dieron la oportunidad de formar parte de este rotativo en 1987 hasta el 2007, con unas ligeras pausas. Felicitaciones a todos quienes conforman El Norte en sus primeras 3 décadas de actividad prolífica en bien de sus usuarios.
