IBARRA.- El Salón Auditorio de la Prefectura Ciudadana de Imbabura abrió sus puertas, este jueves 9 de noviembre de 2023, para recibir en un taller de trabajo, a los docentes de las unidades educativas que participan en la Campaña “Coexistir es la Clave”, promovida por el Consejo Consultivo Local de Educación Ambiental de Imbabura, CCLEA-I, a través de su directorio: la Prefectura, la Dirección Zonal 1 del Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, MAATE, y la Coordinación Zonal 1 del Ministerio de Educación, en el marco del Plan de Educación Ambiental de Imbabura.
La prefecta subrogante de Imbabura, Paolina Vercoutère Quinche, al dar la bienvenida a los asistentes destacó la trascendencia de esta iniciativa conjunta, a fin de lograr una mayor conciencia ciudadana urbana y rural, sobre el valor de la conservación de la fauna silvestre y la importancia de actuar responsablemente sobre las causas que afectan a las interacciones humano – fauna.
Recordó que siendo Imbabura un rincón reconocido como Geoparque Mundial es importante cuidar la flora y la fauna que le dan una característica especial a esta tierra. “Como prefectura estamos emprendiendo actividades con las comunidades que registran riesgo medio y alto en esta interacción con el oso andino, especialmente. Estas actividades tienen varios enfoques que van desde la educación y acciones de respuesta, mediante la entrega de kits, la implementación de medidas disuasivas, un mejor control sobre la frontera agrícola y la reforestación adecuada para garantizar la convivencia armónica con la fauna silvestre”.
Luis Cachimuel, representante de la Dirección Zonal 1 del MAATE, se refirió a la importancia de la educación frente al cuidado del ambiente, sus recursos naturales y su fauna silvestre, señalando que un trabajo efectivo para generar conciencia sobre la conservación debe partir desde la articulación entre las instituciones públicas, para brindar acompañamiento y alternativas de solución ante problemáticas derivadas de la interacción entre seres humanos y animales silvestres.
Justamente, según un reporte de la Dirección de Gestión Ambiental de la Prefectura, las interacciones entre la gente y la fauna silvestre en esta provincia se han vuelto más directas, a causa de la afectación del hábitat de los animales, osos y pumas, especialmente, a través de los incendios provocados y talas de bosques. En consecuencia, se ven forzados a encontrar alimento atacando a los animales de granja, generando afectación económica constante a las familias del sector rural de varios cantones.