Las Naciones Unidas y su Programa Ambiental declararon el 05 de junio de cada año como El Día del Ambiente, una relevante fecha que nos recuerda la importancia de cuidar nuestro planeta y su entorno, hábitats naturales, ecosistemas y toda la vida que próspera dentro de ellos, impulsándonos a continuar aportando propuestas para ser generadores de cambio y ayudar a reducir la huella de carbono que emanamos.
Debido a las actividades industriales del ser humano, la capa de ozono se ha deteriorado y los gases tóxicos han producido el fenómeno conocido como efecto invernadero que produce un aumento peligroso de la temperatura en la tierra.
Muchos son los científicos que afirman que el momento de cambiar esta situación es ahora para evitar que lleguemos al 1,5°C de calentamiento global, objetivo que será posible si las emisiones netas mundiales de CO2 de origen humano se reducen en un 45% para 2030, hasta alcanzar el “cero neto” aproximadamente en el año 2050. Esto solo será posible formando una sociedad sostenible y equitativa con el ambiente.[1]
Como parte de las actividades en las que todos podemos contribuir para detener el cambio climático que hoy es más acelerado que en años anteriores, es transformarnos a nivel energético, adoptando a la energía renovable no convencional como nuestra nueva fuente de energía, tanto para hogares como para industrias.
Esta nueva alternativa muy conocida a nivel mundial ha ido adquiriendo más importancia en los últimos años, siendo utilizada en plantas industriales de los 5 continentes gracias a sus beneficios para aprovechar las fuentes naturales que provee el sol, el agua o el aire.
El uso de energía limpia es una opción completamente amigable con el planeta y que se puede aplicar en diferentes sectores, siendo el uso ilimitado de recursos naturales una gran fuente para los seres humanos y en especial las empresas, ya que disminuirían sus costos de planilla de luz y aportarían con los objetivos propuestos para mitigar el cambio climático. ¿Pero cómo se desarrolla esta novedosa propuesta en el país?
Ecuador está dando grandes pasos hacia su transformación energética, gracias a leyes y convenios que promueven este cambio, pero lo más importante es tener una guía para hacerlo y es en este marco que está EnerCity, una empresa que potencia el uso de energías renovables no convencionales a través de un profundo estudio de campo para reconocer la mejor alternativa de alinearse a estas fuentes inagotables.
El Ecuador es una gran potencia solar que dispone de esta energía prácticamente todo el año, siendo esto un excelente camino para la energía fotovoltaica, rentable en este territorio.
EnerCity se especializa en el uso de energía eficiente, por ejemplo, paneles solares y bombas de calor que aprovechen la energía del sol para generar energía eléctrica y calentar agua para casas y procesos industriales Son inversiones altamente rentables para los ecuatorianos.
“La lucha contra el cambio climático es una pelea de todos, si nos unimos en pequeñas acciones para mitigar este problema social, ambiental y mundial podremos salir adelante con los objetivos que se platean en la firma del acuerdo de París. La energía renovable es una opción a gran escala y es momento de hacerla nuestra y fomentar su uso en diferentes partes del mundo. Ecuador es una gran potencia para la energía solar y es deber de todos integrarla a nuestro diario vivir, en especial de los líderes industriales para juntos ser parte de la esperanza de nuestro planeta”, comentó Francisco Navarro, CEO de Enercity.
