María Angulo de 75 años de edad, todos los domingos iba a misa de las 7 de la mañana a la iglesia de la Virgen de Guadalupe en las 4 Esquinas de Ibarra, pero el 19 de agosto de 2.018, fue atropellada por un vehículo, arrastrada hasta la vereda, quedó en la vía y el conductor se dio a la fuga. Los familiares de doña María presentaron una demanda en contra del conductor, pero la justicia no aceptó, por lo que aparece ella como la responsable de su atropellamiento.
El hecho ocurrió hace año y medio, a las 6 y 15 am en la calle Hernán Gonzáles de Saá y río Pintag, cerca al polideportivo Los Ceibos. Doña María se bajó de la acera a la calzada para ver si venían carros en dirección este- oeste, alcanza a divisar que viene un vehículo y decide regresar a la vereda, ese momento es impactada por el carro vehículo Toyota Spark color blanco que le arrolla en su pierna izquierda.

Según un testigo del hecho, en el vehículo iban dos personas, quienes se dieron a la fuga, bajaron a toda velocidad por la calle Quinindé, tras el polideportivo Los Ceibos, afortunadamente alcanzaron a tomar el número de placas del automotor.

Los vecinos inmediatamente ayudaron a la señora herida, lograron amarrarle la pierna para detener la hemorragia, unos minutos después llegaron los agentes de tránsito en la ambulancia y la llevaron al hospital.

La víctima fue atendida en forma emergente en el hospital del Seguro de la ciudad de Ibarra, en virtud de la gravedad de las lesiones los facultativos tuvieron que amputarle su pierna.
Los familiares demandaron al propietario del vehículo, quien no conducía el automotor, sino su hijo, el caso se trataba en la fiscalía, pero el juez no aceptó la demanda de doña María Angulo, quien ahora usa prótesis en una de sus piernas y ya no sale a la misa de los domingos en la iglesia de las 4 esquinas.

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