“Infractor restaurador” es el proyecto piloto que emprendió la Unidad de Asesoría Jurídica de la Dirección Provincial del Ambiente de Imbabura. El objetivo es concienciar y hacer un llamado de atención a las personas infractoras que atentaron contra la pacha mama.
Este proyecto, el primero a nivel nacional, nace debido a las consecuencias sobre los efectos a causa de las infracciones en contra la naturaleza y el ambiente; por ello en casos de tala ilegal, por cada árbol, el infractor, debe entregar 100 plantas de especies forestales u ornamentales.
En casos de movilización ilegal de madera depende del volumen de la madera movilizada, pero no existen valores fijos se establece en razón de la gravedad de la infracción; la finalidad es restaurar el ambiente.
Las plantas entregadas luego son donadas a gobiernos autónomos descentralizados parroquiales, unidades educativas, personas con proyectos de restauración, para ser utilizados en la ejecución de otros proyectos como el proyecto “mi oficina mi ambiente”.