IBARRA.-  El tiempo de cosecha llegó en algunos poblados de Imbabura. Es el momento del ciclo agrícola en el que se realiza la recolección de los bienes sembrados, una vez que están en su punto máximo de madurez. El siguiente paso es el acopio y la distribución en los mercados nacionales e incluso extranjeros. Los agricultores se muestran felices, pues es el final de una etapa de trabajo y dedicación en el campo.

La jornada de cosecha se vivió con gran emotividad, por parte de las familias que son parte de la Asociación de Productores del Valle, ASOPROVALLE, una organización que produce y comercializa mango, ubicada en el valle del Chota de Ibarra y que forma parte del Proyecto de Mejoramiento de los Procesos Productivos, Comerciales, Ecológicos, Socioculturales e Institucionales de la Cadena de Valor de Frutales en las Provincias de Imbabura y Carchi, ejecutado por la Prefectura Ciudadana de Imbabura, con el financiamiento del Fondo Ítalo Ecuatoriano para el Desarrollo Sostenible (FIEDS).

El prefecto Richard Calderón no quiso perderse la experiencia de compartir esta grata experiencia y por eso fue parte de un día de campo en la que los agricultores cosecharon esta exquisita fruta, dulce y refrescante, típica de áreas tropicales y subtropicales. El lugar de encuentro fue la parroquia de Ambuquí, en donde dicha asociación, cultiva este producto. El objetivo de su presencia fue compartir la gran satisfacción que deja el trabajo realizado y reafirmar el compromiso de apoyo al sector productivo de Imbabura.

En esta zona, alrededor de 93 hectáreas de terrenos están dedicadas  a la producción anual de 2´325.000 kilos de mango. Son 12 los socios, quienes junto a sus familias se dedican a esta actividad, para lo cual, como parte del Proyecto FIEDS, la Prefectura adecuó un centro de acopio y procesamiento de fruta, bajo la certificación de la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario, AGROCALIDAD. Una inversión de cerca de 40.000 dólares se destinó para este propósito, que consistió en la implementación de un cuarto frío, gavetas plásticas, balanzas digitales y equipamiento necesario.

Otros sitios en donde arrancó la cosecha abarcan las comunidades San Gerónimo, Guadal, Limonal, Guallupe, Gualchán, San Pedro, Rocafuerte, El Pital, San Patricio, San Vicente, Parambas, Palo Amarillo, Cachaco, Lita y Río Verde, pertenecientes a las parroquias La Carolina y Lita. Aquí el cultivo que da mejores réditos actualmente es la guanábana y a ello lo apuestan los miembros de la Asociación de Productores de Guanábana, ASOPROGUAN.

Así mismo, para mejorar su trabajo, la Prefectura destinó 58.673,36 dólares a fin de implementar un centro de acopio totalmente equipado, con gavetas y una planta purificadora deagua. A parte de esta acción, lo más importante quizá es el apoyo en la exportación de este producto hacia mercados europeos, a través de la alianza con empresas españolas ENEBRAL y Amazónica Premium. En estas primeras experiencias se logró introducir en mercados de esas naciones una tonelada de guanábana, habiéndose ampliado la oferta de productos a otros rubros de frutas.

Es importante mencionar que, tras la caída de producción en Santo Domingo, ASOPROGUAN se ha convertido en el potencial proveedor de guanábana en el mercado nacional, con pedidos en la tercera semana del mes de agosto de hasta 7 toneladas de fruta. Así mismo para alentar, la labor de los agricultores, el prefecto Richard Calderón llegó a uno de los terrenos de Rocafuerte, en donde la cosecha arrancó con éxito.

Finalmente, en la comunidad Cachaco de Lita se vivió momentos de satisfacción en compañía de los integrantes de la Asociación “Grano de Oro”, dedicados al cultivo de cacao. La asociación, con la asistencia técnica y ayuda del organismo provincial, en los últimos años viene dando pasos firmes, con el mejoramiento del manejo de las huertas.

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