La asambleísta del correísmo, Gissela Garzón, solicitó al Consejo de Administración Legislativa, que den seguimiento cada 3 meses al estado de salud de la fiscal general Diana Salazar, quien está embarazada, para determinar cuándo se retoma el juicio político en su contra.
“Cuando los médicos den fe que todo lo que han dicho es mentira, tendrán que comerse sus palabras y sus mentiras. Con mis hijas nadie se va a meter!” dijo la fiscal Diana Salazar al rechazar el pedido pedido de Gissela Garzón