“Con los churos hechos quédense de que les vayamos a saludar porque si no saludan a Quito, si no hacen ninguna obra para Quito, no tenemos por qué ser recíprocos de absolutamente nada”, señaló el alcalde de la capital, Pabel Muñoz, dando a entender que no dará la tradicional serenata en el palacio de Carondelet.
Esta reacción del alcalde Muñoz surgió a raíz de que el SERCOP no autorizó la firma de 50 contratos para eventos por las fiestas de Quito.
“Si quiere paralizar esas 50 actividades que tenemos, paralice nomás. Los quiteños vamos a celebrar con dignidad”, afirmó Muñoz