Desde esta semana, los habitantes de la comunidad de La Rinconada de la parroquia Angochagua del cantón Ibarra pueden resolver sus conflictos comunitarios a través del diálogo y resoluciones en equidad.
Luego de un proceso de socialización, capacitación y elección por consenso, Sofía Juma fue electa como jueza de paz del sector.
El director provincial del Consejo de la Judicatura (CJ), Mgs. Israel Lozada, manifestó que es motivo de satisfacción ver que un programa basado en la voluntariedad esté dando los resultados, ya que la parroquia de Angochagua cuenta con 3 jueces de paz.
“Vemos cómo los ciudadanos confían en los jueces de paz nombrados por ellos mismos y avalados por la Judicatura. De esta forma acercamos la justicia a territorios alejados de las urbes. Hoy con esta nueva designación alcanzamos un total de 26 jueces de paz, de esta manera descongestionamos el sistema judicial y damos valor a la solución de conflictos de manera pacífica”, sostuvo Lozada.
“Aunque parezca que no hay problemas estos sí existen. Buscaremos las mejores alternativas para solucionar los conflictos. Con capacitación y conocimiento procuraremos llegar a acuerdos mutuos entre las personas para que continúen siendo amigos y se puedan rescatar los valores en nuestra parroquia”, dijo Sofía Juma, jueza de paz posesionada.
Para el cumplimiento adecuado del servicio de justicia de paz, el CJ dota de capacitación, insumos, equipamiento y mobiliario en las instalaciones que se destinan para el servicio en coordinación con las autoridades locales de cada parroquia.