La plaza de toros “La Candelaria” de Ibarra está en abandono, en la alcaldía de Álvaro Castillo, se tenía elaborado un proyecto para hacer allí un mini coliseo con una capacidad para 2 mil 500 personas e incluirá un patio de comidas, pero el tiempo no le alcanzó y la presente administración no continuó con esa idea.
La plaza de toros la Candelaria de la ciudad de Ibarra fue construida por decisión del Concejo Municipal de 1992 y del alcalde de ese entonces, Marco Tafur, quien acepto una iniciativa de un grupo de ciudadanos amantes de la fiesta de los toros y se autorizó su edificación en La Canderaria, en la avenida El Retorno, en donde están ubicados los monumentos a El Retorno de los ibarreños, luego del terremoto de 1.868.
En la plaza de toros en los años 90s del siglo pasado tuvo mediana actividad y se desarrollaron algunas corridas de toros, después se perdió el entusiasmo y este escenario quedó en el abandono, en los años 2.000 se hicieron algunos eventos populares, entre ellos el “toro loco” y 13 conciertos de rock.
El ex alcalde Castillo, adjunto a la plaza, hizo un centro cultural y deportivo. Este complejo tiene tres zonas, la primera, de tipo cívico y cultural, en un área de 600 metros cuadrados. Incluye un memorial histórico referente a El Retorno, además de la recuperación de los monumentos existentes.
La segunda zona está enfocada al deporte y la recreación de las familias. Allí se construyeron 2 canchas de fútbol de césped sintético, canchas de vóley y de uso múltiple. Además un circuito de trote, juegos infantiles y áreas verdes.
El complejo también contempla baterías sanitarias, parqueaderos, entre otros servicios. La tercera zona era la readecuación de la plaza.